New York, siempre es buen plan

Quién diga que no le gusta NY es porque no ha estado, puede que vivir allí no sea lo que más te apetezca en el mundo, quizás prefieras una isla paradisiaca o aislarte en la montaña pero os juro que al menos una vez en tu vida debes ir. Aunque sólo sea por ver tantísimos escenarios de películas que has podido ver a lo largo de tu vida, dar un paseo por Central Park o subir a algunos de sus rascacielos míticos.

Cierto es que el ritmo de vida que viven allí es como de otro planeta, pero tiene su encanto. Sus grandes avenidas, los puestos de comida, los barrios residenciales con sus escaleras de entrada, los miles de cafés que te encuentras a cada paso, no se, es que a mí cada vez que voy me sigue pareciendo una de las ciudades donde viviría unos meses.

Hace un par de semanas que volvimos a visitar NY, así que es buen momento para actualizar el blog con nuevos sitios que hemos visitados, 2 nuevos miradores que no te dejarán indiferentes y algún sitio rico que no puedes perderte 😉

QUÉ VER

Te diré que el simple hecho de pasear por las calles ya es un espectáculo, a mi me gusta hacer como si viviera allí, pasear con tranquilidad y dejarme llevar, pero yo te voy a dejar mis imprescindibles:

Top Of The Rock, para mí sin duda tiene las mejores vistas, porque además tienes espacio de sobra en las distintas terrazas del edificio, a un lado puedes ver Central Park y desde el otro tienes la monstruosidad de edificios. Era mi edificio preferido y supongo que Rubén por eso decidió hincar rodilla allí 😉 es de esos sitios a los que vuelvo siempre. Coge las entradas antes del atardecer y así verás la ciudad y el cambio de luz natural al tremendo cambio con las luces de los edificios, para ello mira en tu movil hora de puesta de sol y coge la entrada 20 minutos antes.
Empire State, sinceramente creo que la mejor manera de verlo es desde otra perspectiva, suele estar abarrotado de gente vayas a la hora que vayas, pero es una de los edificios que más hemos visto en las pelis así que es visita obligada.
Flatiron, edificio emblemático de NY, actualmente se encuentra en obras.
Observatorio One World Trade Center, visita obligatoria, nosotros subimos por la tarde, hicimos un tour con Guia por allí y era el punto final. Mi recomendación es que en función de los días te marques cosas imprescindibles pero lo hagas con tranquilidad.
Central Park, con sus múltiples posibilidades para hacerlo andando, en bici o una carrerilla mañanera, puedes coger además picnic en Dean & Deluca y comer allí.
Museo de Arte Contemporáneo (Moma) o el Metropolitan (MET).
La Biblioteca Nacional
Catedral
Museo de Historia Natural, recuerdo que lo dejamos para un día que llovía y hacia mucho frio, al ser grande estuvimos resguardados del tiempo una mañana larga. Ideal para ir con niños aunque yo ya soy mayorcita y lo disfruto mucho.
Dar un paseo por High Line, de las veces que lo he hecho la que más me ha gustado ha sido de paseo por la noche, en verano es imposible hacerlo de día porque literalmente te asas de calor pero si nunca fuiste sería recomendable.
Bryant Park, es un parque donde aparte de actividades puedes hacer picnic, de camino a nuestro hotel cogíamos algo de comer en Whole Sale y cenábamos allí.
Vessel, en Hudson Yards (un barrio nuevo), nosotros no pudimos subir porque cuando fuimos nevaba bastante y estaba cerrado pero contamos con un excelente anfitrión que ha estado inmerso en la iluminación del edificio que nos explicó todo.
Recorrer el puente de Brooklyn (bonito de día y con encanto de noche porque ves todo Manhattan iluminado), si lo haces de día, deberías llegar hasta Dumbo donde podrás tener la típica foto.
Ver la Estatua de la Libertad desde el ferry de Staten Island
Obviamente si vas en Navidad no puedes perderte el árbol del Rockefeller y si te atreves salir a la pista de hielo para patinar.
Radio City, cuando fuimos en Navidades vimos un espectáculo de las Rockettes y nos gustó mucho, compramos las entradas a última hora y mereció mucho la pena.
Mirador Edge, situado en el centro marcial de Hudson Yards (por el que se accede), es un mirador que sale del edificio como en una plataforma, con una zona transparente desde la que puedes ver el suelo (no apto para personas con vértigo). Nosotros fuimos al atardecer y la verdad que era impresionante.
También visitamos SUMMIT One Vanderbilt, varias plantas con diversas atracciones sensoriales, espejos, cristaleras y vista panorámica de NY, desde donde podrás ver los edificios de alrededor. Nosotros cogimos la entrada con el ascensor (pero no merece mucho la pena).
Little Island, es un nuevo parque – flotante – en el Hudson. Puedes visitarlo si estás por Chelsea, si vas a comenzar o has terminado de recorrer High Line. En primavera o verano tienes que reservar por tema de aforo pero es gratuito.

DONDE COMER

Entre la amplia variedad que ofrece la ciudad, te voy a poner los sitios a los que he ido y me han gustado, las recomendaciones que tengo pero que no he probado las seguiré guardando para próximas recomendaciones:

Comida

Rue 57
Sarabeths: su brunch es bastante nombrado y os lo pongo por si os apetece pero para el precio que tiene el menú (y no soy nada mirada si las cosas están ricas) no merece la pena por la comida que es.
Burguer Joint: obvio que el sitio es digno de visitar, se accede por un hotel, el local es pequeño pero merece la pena verlo.
Bajos del Hotel Plaza, allí Rubén probó en Luke´s el famoso bocadillo de langosta.
Shake Shack: sin duda alguna para mí son las mejores hamburguesas que he probado, es una cadena con locales repartidos por distintas zonas.
Zuma, capo con mucho rollo y para una ocasión especial merece la pena, lleva algo para taparte si vas en verano porque el aire acondicionado estaba a una temperatura de pingüino, nos planteamos hasta irnos porque yo especialmente no podía soportar el frio.
The Mercer Kitchen, está situado en el Soho, así que después de una mañana de compras aciertas seguro con la comida que está riquísima. Recuerdo que comimos una hamburguesa, pasta y la tarta de queso.
Jack´s Wife Freda, tienes varios, nosotros hemos ido al de Soho y Chelsea y la comida estaba muy muy rica.
Epistrophy
Café Medi
Balthazar, desde brunch, almuerzo y cena. Típico sitio que hay gente y cola siempre por eso te recomiendo reservar, la carta es cortita así que pide simplemente lo que más te apetezca que estará bueno sí o sí.
Egg Shop: te imaginas el ingrediente estrella de la carta verdad? En todas sus versiones, creo que son los mejores benedictinos que me he comido en la vida. Nosotros estuvimos en el de Nolita, muy pequeño y acogedor.
The Butcher Daughther
Eataly, mercado situado cerca del edificio Flatiron. Encontrarás productos italianos (cosa a la que estamos muy acostumbrados aquí), es bonito, siempre está lleno pero dentro puedes disfrutar de una rica comida o un vino y terminar con un heladito.
Buddakan, lo encontramos de casualidad mientras paseábamos por el mercado Chelsea Market, reservamos para el día siguiente y no nos pudo gustar más, cenamos aquí y nos dimos un pequeño capricho con sopita incluida, el ambiente es muy guay y tiene música.
Cafe Gitane, tiene 2 localizaciones. Había oido hablar de la alocado toast y no pude irme sin probarla. Mi veredicto sin duda un 10.
Murrays Bagels, un local pequeño pero hasta arriba de gente, si no vas con mucho hambre mi recomendación es que compartas porque llenan muchísimo.
Ralph’s Coffee, también tiene varios locales pero nosotros estuvimos andando por Madison Av y pillamos mesa fuera y al sol.
Queens Yard, bar situado en el centro comercial de Hudson Yard, nos pilló un chaparrón y decidimos tomarnos algo allí. Tiene buenas vistas del atardecer.
La Esquina, puede pasar desapercibido pero este local que por fuera es un sin más por dentro es muy curioso. Reservamos para cenar, un mejicano con una comida rica rica, la atención de lujo y un sitio curioso. No digo más. Nos dejamos aconsejar y acertaron de lleno.
Una tarde cogimos unas galletas en Milk, un local bastante famoso porque su dueña tiene una historia bastante peculiar, yo había visto un programa de ella pero pasamos de casualidad así que improvisamos merienda.