Todas tenemos una rutina que seguimos o intentamos seguir cuando tenemos más tiempo, para cuidarnos. Aunque no lo creáis, esta debería de ser una de nuestras prioridades: cuidarnos. A veces, las obligaciones y la vida en general, nos hace restar tiempo de esta prioridad para dedicárselo a otras cosas, pero no por ello deja de ser importante.

Quiero compartir con vosotras la rutina con la que cuido mi rostro este verano:

El primer paso que quiero mencionar es mi limpiador facial, un gel con textura de mousse que os aseguro que además de refrescar y haceros sentir en una nube, es perfecto para retirar vuestro maquillaje con toda la suavidad que os podéis imaginar. Hidratante a más no poder y calmante si sufres de irritación cutánea. Si tienes la piel sensible o padeces rojeces regularmente, éste producto es tu aliado perfecto.

Sin jabón ni perfume que irrite. Suelo utilizarlo en la mañana y en la noche, pero esto depende de tu tiempo y del tipo de piel que tengas. Eso sí, tienes que probar retirarte el maquillaje con esta suavidad y dejando tras de sí, tanta hidratación.

Un sérum con fórmula antioxidante para prevenir las manchas de mi piel, tan recurrentes a veces en verano. Este sérum está formulado con antioxidantes extraídos de la aceituna y previene manchas así como frena el oscurecimiento de las mismas.

Siempre estoy hidratando mi piel, he probado varios sérums hidratantes que se ajustan a las necesidades que tengo en el rostro y al final, siempre he llegado al mismo punto: elige un sérum que active los mecanismos naturales de hidratación de tu piel. Os recomiendo Hydrabio, formulado para estimular la producción precisamente de las aquaporinas de nuestra piel, las encargadas de propiciar hidratación natural. Os prometo una hidratación completa y duradera, tenéis que probarlo.

Mi rostro siempre protegido. Ya os he contado otras veces que nunca salgo de casa sin un buen protector solar que además funcione como hidratante. Utilizo Advanced Day por varias razones, la primera la protección que me ofrece, la segunda su acción contra el envejecimiento prematuro y la tercera, no menos importante, su textura ligera con acabado invisible.

Un reafirmante siempre a la vista. Contar con un reafirmante entre los productos de mi rutina siempre ha estado entre mis imprescindibles. Nuestra piel puede perder elasticidad, firmeza y tono por diversos factores, por lo que no podemos olvidar  la importancia de la oxigenación celular y la función del colágeno. Si estáis buscando un reafirmante de textura ligera con acción tensora y con un efecto iluminador sorprendente, probad DMAE.