GLASS SKIN: LA PIEL DE MODA
Glass Skin o Glowy Skin, están de moda y en la mayoría de rutinas personalizadas que hago es uno de vuestros deseos: conseguir una glass skin, que no es más que una piel luminosa, que irradie luz, jugosidad y tono uniforme, lo que desde siempre hemos definido como “efecto buena cara”.
¿CÓMO CONSEGUIR UNA GLASS SKIN?
Para ese efecto de piel suave y luminosa que parezca que la luz rebote es fundamental que la piel esté lisa e hidratada.
Para ello, es fundamental tener una piel limpia, sin células muertas y muy hidratada, para lograr ese efecto jugoso. En resumen, estos son los 3 pilares básicos:
LIMPIEZA – EXFOLIACIÓN – HIDRATACIÓN
ACEITE LIMPIADOR
Incorpora a tu rutina de limpieza nocturna un aceite o bálsamo, hará maravillas por tu piel, te lo prometo. El aceite penetra en el poro limpiándolo en profundidad, lo que ayuda a prevenir puntos negros y mejorar el aspecto de los poros. Y sí, también para pieles grasas.
Si buscas una piel luminosa, asegúrate de tener un primer paso de limpieza como Cleansing Oil con textura más fluida o si te gustan texturas más untuosas y sensoriales te recomiendo esta maravilla.
exfoliante, el gran aliado del glow
Eliminar las células muertas es fundamental para conseguir una piel luminosa. Hay opciones para todos los gustos, puedes hacerlo de forma diaria si eres de las que busca misma rutina para todos los días con este, u otros de acción intensiva para realizar una vez a la semana como puede ser este duo infalible.
